El uso de BIM en la construcción se ha convertido en algo esencial. Obligatorio por ley en proyectos de ámbito público, es muy recomendable en iniciativas privadas. Todo proyecto de construcción que quiera llegar a buen puerto con rapidez y precisión necesita el apoyo de esta metodología.
Building Information Modelling (BIM) es una metodología de trabajo colaborativo y multidisciplinar para la gestión y mantenimiento de proyectos de edificación o ingeniería a través de un modelo digital en 3D, que permite gestionar los elementos durante todo el ciclo de vida.
BIM abarca desde la planificación, el diseño y el modelado, hasta el mantenimiento, restauración o rehabilitación. Permitiendo mejores resultados, al mejorar la comunicación de todos los agentes involucrados, disminuyendo los riesgos y resultando más eficiente.
Importantes entidades como ADIF, AENA, Ferrovial, OHL, Renfe o Correos ya han implementado esta metodología en sus proyectos, debido a las numerosas ventajas que aportan un mayor control de todo el proceso.
¿Y cómo pueden ayudar los drones en la metodología BIM? De diferentes maneras, tal y como señalan desde DJI. Una de las más importantes es el control del progreso de la construcción. Los drones son capaces de escanear la obra con rapidez y desde del aire, mejorando enormemente el ángulo de visión que se obtiene con fotos a nivel del suelo. El software se encarga de crear la representación digital, que se compara con los planos 3D para determinar las posibles desviaciones con una gran precisión.
En concreto, los drones de DJI utilizan la tecnología Smart Oblique Capture, que optimiza la captura de imágenes para crear representaciones extremadamente precisas.
Modelos como el Mavic 3 Enterprise y el Matrice 300 RTK equipado con una cámara Zenmuse P1 son perfectos para este tipo de trabajos.
Los drones también son de gran utilidad en proyectos de construcción de líneas eléctricas. Se trata de obras complejas por la gran extensión que debe cubrirse. Los drones son capaces de realizar mediciones de grandes extensiones de terreno en mucho menor tiempo que equipos de tierra, aportando además una mayor precisión. Con la ventaja de aportar datos actualizados a medida que avanza la obra realizando nuevos vuelos.
Instalación de bloques prefabricados de hormigón. Para colocar correctamente los empotramientos prefabricados en hormigón, los contratistas necesitan conocer los datos exactos de posición. Los datos que puede aportar un dron les permite capturar la información necesaria y acceder a ella a través de una plataforma BIM.
Proyectos constructivos en entornos complejos. Muchas obras se llevan a cabo en entornos alejados, con complicada orografía o de difícil acceso, lo que dificulta el seguimiento y precisión de los trabajos. Los drones pueden captar información actualizada de forma más asequible que con un avión, y con más precisión que las imágenes por satélite.